El 12 de octubre marca el día de la invasión de las Américas por los colonizadores europeos en 1492, cuando comenzó el saqueo y la destrucción de los pueblos que aquí vivían. Más de 500 años después, la colonización y sus herederos continúan quitando vidas, esclavizando a la gente y usurpando tierras. Desde entonces, los pueblos siempre han resistido. En este contexto, el internacionalismo proletario y de los pueblos se ha convertido en una de las grandes armas contra los colonizadores y los capitalistas. Es cuando nos entendemos como un solo pueblo – trabajadores, indígenas, campesinos, quilombolas, desempleados, estudiantes, etc. – que nos damos cuenta de lo que nos une: las resistencias y rebeldías en todo el mundo y la fuerza pedagógica de la lucha revolucionaria, contra la ” larga noche de la colonización”, en palabras de los Zapatistas. Las barricadas de fuego que hemos levantado en Brasil y las piedras que hemos lanzado contra la represión en el campo y en la ciudad son las mismas que las del pueblo chileno que, desde octubre de 2019, protesta contra los explotadores y asesinos que comandan el Estado, derribando estatuas que rinden homenaje a los antiguos líderes del genocidio que empezaron. También recordamos que en octubre de 2020, todavía recordamos un año de la rebelión popular e indígena contra el paquete liberal de Lenin Moreno y el Fondo Monetario Internacional (FMI) en Ecuador.
De la misma manera, podríamos decir que la lucha de los pueblos indígenas y de otros pueblos-nación en América Latina se encuentran por medio de un objetivo común: la recuperación de sus tierras ancestrales. En este proceso, muchos camaradas han caído mártires o han sido encarcelados por luchar. Así es como la lucha de los Guaraníes y los Kaiowá en Mato Grosso do Sul es parte de la misma resistencia de la liberación territorial Mapuche en Chile y Argentina. En julio de este año ocurrieron dos hechos que vinculan ambas luchas: el inicio de la huelga de hambre de los presos políticos Mapuche en Chile y el pedido de hábeas corpus para Leonardo en la Corte Suprema de Brasil. Y así abrimos la segunda parte de la serie internacionalista con la CAMPAÑA POR LA LIBERTAD DE LEONARDO DE SOUZA GUARANI-KAIOWÁ Y POR LA LIBERTAD DE TODOS LOS PRESOS POLÍTICOS MAPUCHE. No podemos olvidar que América Latina está en llamas y, como dicen los combatientes chilenos: ¡quien se olvida de los presos políticos, se ha olvidado de la lucha!
El Estado mata al hijo y encarcela al padre: el arresto de Leonardo de Souza
En diciembre de 2018, poco más de dos años después de la masacre de Caarapó, el Sr. Leonardo -padre de Clodiodi, que fue asesinado en la masacre por los terratenientes- fue detenido injustamente por la Fuerza Nacional, que invadió su casa, agredió a su familia y lo encarceló en la Penitenciaría Federal de Campo Grande, donde sigue detenido en graves condiciones de salud, como lo denuncia la FOB en el siguiente comunicado: https://lutafob.wordpress.com/2019/05/28/recc-ms-14-de-junho-o-terrorismo-de-estado-mata-o-filho-e-prende-o-pai/. Leonardo está enfermo y encarcelado. Sufre de hipertensión, diabetes, artrosis y hernia, es anciano y tiene otras enfermedades degenerativas crónicas, además de presentar un cuadro de empeoramiento de su salud mental. Leonardo hace uso continuo de medicamentos controlados, muchos de los cuales no tiene acceso dentro de la cárcel. El caso está en la Corte Suprema Federal, que señala el mantenimiento de la prisión de Leonardo. No nos cansaremos de destacar que ningún terrateniente ha sido encarcelado, a pesar de las abundantes pruebas de su participación en la masacre.
El 3 de septiembre de 2020, el profesor Guarani Kaiowá y otro de los hijos de Leonardo, Jesús de Souza, de la aldea Tey’i Kue, en Caarapó (MS), murieron después del empeoramiento de la condición de Covid-19. Sin embargo, la enfermedad causada por el nuevo coronavirus no puede ser el único factor que explique la muerte del compañero Jesús. Él fue un sobreviviente de la masacre de Caarapó en 2016, cuando su hermano Clodiodi Aquileu de Souza fue asesinado por los terratenientes de la región. El profesor Jesús llevaba una bala en su cuerpo desde que fue alcanzado por los mismos asesinos de Clodiodi, por los mismos genocidios que hirieron a más de 10 personas ese 14 de junio, recordados anualmente por la comunidad para preservar la memoria de sus mártires. Como si esto fuera poco, la familia de Jesús fue sorprendida por la Policía Militar -la misma que acusa a Leonardo y fue parte de la masacre- junto con los racistas del diario Caarapó News, que transmitieron la imagen de la viuda de Jesús en el momento de su luto, acosando a la familia con cámaras y la presencia de los verdugos del pueblo. Cabe mencionar que el Estado quiere militarizar las barreras sanitarias ahora que las comunidades o bien se han auto-organizado o bien cuentan sus muertos (especialmente el pueblo Terena). El Estado continúa su marcha fúnebre.
A continuación se presenta una carta elaborada por los Guaraní y Kaiowá de la Tierra Indígena Dourados-Amambaipeguá I, en la que se recuerda la masacre de Caarapó de 2016, la reciente muerte del profesor Jesús de Souza y el encarcelamiento de Leonardo. El pueblo reclama sus mártires y la libertad de Leonardo, pero también exige el castigo de los terratenientes asesinos, que aún hoy en día se benefician de la sangre indígena.
¡Clodiodi cayó, muchos se levantarán!
“CARTA DE LA TIERRA INDÍGENA DOURADOS AMAMBAIPEGUA I
TEKOHA KUNUMI POTY VERÁ
El 07/09/20, nos reunimos en el tekoha Kunumi Verá en honor de Clodiodi Aquileu de Souza. Anteriormente tuvo una gran masacre, y causó grandes pérdidas a nuestra comunidad. Pedimos a nuestras grandes autoridades que dialoguen en cada uno de nuestros tekoha. En el año 2015, se publicó el Tekoha Guasu Dourados Amambaipegua I. En el año 2016, el 12 de junio, la comunidad decidió recuperar su tekoha. El 14 de junio de 2016 hubo una masacre que mató a una persona y dejó 9 heridos con la bala de metal y 8 personas heridas con la bala de goma. La salud de los heridos quedó comprometida y con secuelas. Una de las víctimas fue criminalizada, que es Leonardo. Hoy la comunidad entiende que está siendo perseguida por el gobierno del estado, la sanidad y las autoridades competentes, todo esto es por nuestro tekoha guasu.
El resultado de estas persecuciones: ya han ocurrido 4 muertes, la mayoría de la familia de Leonardo que en ese momento eran sobrevivientes de la masacre. La primera víctima de la masacre fue Clodiodi, la segunda fue Emenegildo de Souza, que es el hermano de Leonardo, y la tercera muerte fue el otro hermano de Leonardo, Zenildo Isnarde de Souza. La última víctima fue el hijo mayor de Leonardo, el profesor Jesús de Souza. Todos vinieron del hospital de la vida en Dourados. Por lo tanto, nosotros la comunidad de la aldea Te’yi Kue, municipio de Caarapó, MS, pedimos la liberación de Leonardo para responder en libertad, por ser una familia destruida y por su salud, es diabético, tiene alta presión sanguínea, reumatismo y hernia, etc.
Hoy entendemos que la persecución es sólo contra los indígenas, y los autores de la masacre, que causó un gran y bárbaro crimen, quedan impunes. Por eso nosotros en la comunidad pedimos la libertad de Leonardo, porque somos el resto de su familia. Nosotros, la comunidad de la aldea Te’yi Kue, junto con Aty Guasu, ya no queremos que ocurran muertes en la familia de Leonardo. Si hay más muertes por persecución, tendrán el mayor conflicto jamás visto. Porque hoy tenemos 17 sobrevivientes de la masacre, que están en riesgo de vida. En todos estos eventos, nosotros la comunidad indígena Guaraní y Kaiowá de Dourados Amambaipegua I queremos la demarcación ya. Ni una gota más de sangre Guaraní y Kaiowá.”
En la carta, la comunidad deja clara su voluntad de luchar por la vida, la libertad y la salud de Leonardo. Su familia ha sido maldecida por el agronegocio, y sin embargo levanta la bandera de la solidaridad entre los pueblos: en la siguiente bandera, no sólo Leonardo, sino todos los presos políticos Mapuche deben ser liberados. Es a esta llamada a la que FOB responde hoy.
¡Libertad para Leonardo Guarani-Kaiowá y todos los presos políticos Mapuche! FOB-SP
Los 27 Presos Políticos Mapuche: Criminalización de la Resistencia Ancestral
La resistencia Mapuche es un gran símbolo del levantamiento de los pueblos, que revela una antigua historia de lucha contra los colonizadores. Los Mapuche fueron el primer pueblo que derrotaron a la corona española e impusieron el control territorial autónomo de Wallmapu – su territorio ancestral – contra el avance de la frontera colonial. Al igual que los Guaraní y los Kaiowá, fue sobre todo a partir de finales del siglo XIX que, ante la independencia de los Estados de Chile y Argentina, la desterritorialización y un genocidio sin precedentes se apoderaron de los territorios ancestrales de los Mapuche, lo que consolidó el proyecto colonial de mantener intereses extranjeros en la región. Hoy en día, las principales batallas del pueblo Mapuche son contra los hijos de la corona: grandes empresas agroindustriales, madereras, salmoneras, represas hidroeléctricas y, predominantemente, contra empresas forestales que desertizan la tierra con monocultivos de pino y eucalipto.
Para luchar por la recuperación de sus territorios y la liberación nacional del pueblo Mapuche -una reivindicación anticolonial y contra el Estado- se encuentran ahora en la cárcel 27 guerreros y autoridades espirituales, que han llevado a cabo una histórica huelga de hambre este año, garantizando el retorno temporario de Celestino Córdova a su territorio sagrado y negándose a negociar y a bajar la cabeza ante las migajas propuestas por el mismo Estado que los mantuvo al borde de la muerte. La lucha Mapuche debe servir de ejemplo para todo revolucionario: a través de la ocupación de territorios para controlar la producción y reproducción de la vida – como parte del latifundio de Benetton ocupado en Argentina, por ejemplo – a través del sabotaje de la maquinaria del agro-mínero-negocio, de las grandes asambleas, de la masificación de la lucha hasta la recuperación de la identidad de tantos descendientes mapuches diseminados por todo el país, sus banderas de liberación y destrucción del capitalismo ondean por todo el mundo, llamando a los pueblos a un nuevo internacionalismo revolucionario que arrase de una vez por todas con la escoria colonizadora que amenaza la continuidad misma de la vida.
La familia de Leonardo alza una pancarta reivindicando su libertad y la de todos los presos políticos mapuche.
Unión de las luchas por un nuevo mundo: ¡adelante el internacionalismo proletario y de los pueblos!
La masacre de Caarapó debe ser recordada como un momento importante de resistencia comunitaria contra la represión, del justo derecho a la insurrección de los pueblos del mundo, así como un acontecimiento importante para la memoria de los camaradas que luchan en los territorios contra la barbarie promovida por el latifundio. La resistencia de 2016 no fue dirigida por Leonardo, sino que fue un proceso comunitario de levantamiento contra una acción criminal genocida de los terratenientes de la región de Caarapó, en conjunto con militares y políticos ruralistas. Asimismo, los 27 presos políticos Mapuche deben ser recordados como símbolos de la resistencia ancestral, que desde las mazmorras del Estado chileno aún resuenan en su grito la lucha de los pueblos, que día tras día toman las calles del país exigiendo su inmediata liberación.
Junto con los movimientos de lucha del país, con los Mapuche y el pueblo chileno en lucha por sus tierras y sus presos políticos, por todos los Guaraní y Kaiowá que resisten más de 500 años de colonización en esta maldita fecha del 12 de octubre, debemos construir una campaña por el fin de todas las cárceles, una campaña que exija:
– Libertad inmediata para Leonardo Kaiowá en defensa de su vida y su salud, y que demuestre la profunda relación entre las luchas de los pueblos de la tierra, del campo y de la ciudad. Desde Wallmapu a Tekoha, los pueblos indígenas no están solos;
– Liberación inmediata de todos los presos políticos Mapuche por el derecho a la insurrección y la rebelión digna; repatriación de Facundo Jones Huala!
– Por el derecho a la autodefensa popular y en defensa de la autodemarcación de las tierras indígenas ante la ruina de las instituciones;
– ¡Castigo para los terratenientes responsables de la masacre de Caarapó!
¡LIBERTAD PARA LEONARDO KAIOWÁ Y TODOS LOS PRESOS POLÍTICOS MAPUCHE!
¡VIDA Y MUERTE POR EL TEKOHA!
¡WALLMAPU LIBRE!